En estos tiempos que corren, estamos acostumbrados a ir con prisas, y buscar doctrina se convierte, en ocasiones, en una tarea tediosa. Una vez aceptado el caso, es muy común buscar el artículo que nos afecta en nuestro código legislativo e ir instantáneamente a nuestra Biblioteca para ver si hay un comentario sistemático a la norma. Este acto reflejo es una acción rápida, cómoda y eficaz.
No obstante, si localizado el artículo aplicable, tenemos un momento para planificar la estrategia a seguir, es importante dedicarle parte de ese tiempo a buscar doctrina que nos explique como dirigir dicha estrategia, nos corrobore nuestra posible actuación o nos la corrija.
Hoy en día, aunque la legislación está en constante actualización, es sencillo localizar bibliografía a través de los catálogos de Biblioteca, e-prints, revistas, webs o blogs; pero lo realmente complicado es encontrar doctrina válida y fiable que haya sido escrita por autores especializados en la materia. En otras palabras, lo difícil es leer doctrina que merezca la pena.
Lo primero que debemos hacer, una vez identificado el artículo de la norma que nos afecta, es buscar doctrina en el catálogo de la Biblioteca. Los comentarios sistemáticos son una primera opción, pero en la mayoría de casos son textos breves que no profundizan. Posteriormente, podemos hacer una búsqueda por el nombre el artículo, por si algún autor ha desarrollado el concepto en una monografía o capítulo de una obra colectiva.
Después, debemos buscar en las bases de datos contratadas (Aranzadi Insignis/Fusión, La Ley Digital 360, Tirant Online, El Derecho o Vlex) si dicho artículo ha sido comentado en una revista jurídica, tiene relacionada jurisprudencia (sentencias del Tribunal Supremo, o en su defecto cualquier tribunal que aplique el artículo y lo analice) o doctrina administrativa (resoluciones de la Dirección General de los Registros y del Notariado, de los Tribunales Económico-Administrativos, de los Tribunales Administrativos de Recursos Contractuales y consultas de la Dirección General de Tributos).
Por último, podemos visitar hemerotecas referenciales (como Dialnet) para buscar artículos de revista o capítulos de obras colectivas, e intentar localizarlos posteriormente; e-prints, repositorios universitarios donde se almacenan los trabajos de estudiantes, profesores o catedráticos; webs de despachos competidores especializados en la materia y blogs de profesionales en el sector o miembros del mundo académico.
No es necesario seguir todos estos pasos para hacer una buena búsqueda bibliográfica, ni pretendo con este post hacer una crítica a los comentarios sistemáticos. Mi único objetivo es ampliar el espectro del concepto de las búsquedas doctrinales con la enumeración de todas las posibilidades que tenemos a mano para encontrar lo que necesitamos.